Así será.
Lo he soñado más de diez veces, en distintos lugares, pero con grandes coincidencias. Será en un lugar abierto y sobre los típicos asientos de metal y madera que hay en plazas.
Todo partirá por una conversación entre trivial y profunda. De algunas sonrisas, sacaremos algún tipo de contacto. Sin previo aviso, tomaré una de tus manos y lentamente me acercaré, tocaré tus labios y respiraré lo mismo que tu. Te besaré tan lento como una gotera acaricia las nubes, con la otra mano iniciaré la expedición de mis dedos entre tu cabellera. Besaré tu cuello, rostro y nariz, rogando que aquel momento, todo se mantenga igual y sin palabra alguna.
Lo que sucederá después tiene varias hipótesis, una y la más lógica sería iniciar una relación de perfecto amor, pero como sabemos;" uno no siempre tiene lo que quiere" y que también el amor no es perfecto. Probablemente (y como sucede casi siempre) la explicación de ella, sería que se dejó llevar por el momento y que la perdone, no estoy dentro de sus planes, que no le agrado completamente, que tengo algo de sobre peso y que no le gusta mi barba.
Probablemente nunca más nos veamos y me deje con la terrible incertidumbre, además de miedo para iniciar una relación. Y así sucederá, me dejará sentado en aquella banca pública, a la intemperie de los humanos que transitan frente a mis ojos, me abandonará justo en la confusión de sus labios, en el éxtasis que me provocó.
Fumaré un cigarro, conteniendo lágrimas, retomando mi vida, en el cuarto vació que me espera, lleno de buena música, inciensos y un rincón predilecto para poder conversar solo, entre meditaciones misóginas y tabaco.
Mientras tú corres, como un niño huérfano detrás de un falso padre, sólo que en éste caso es detrás de un huevon, que obviamente no soy yo, porque sería muy tonto que me tratase así, o no? Bah, ustedes caxan.
I’ll fly.
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